En el post anterior terminamos con los principales conceptos para entender las historias del árbol. Una vez podemos ver los conflictos y los comprendamos, podemos pasar a la reparación de estos.
Reparación y Sanación
Con Reparación me refiero a la forma natural que tiene el árbol de subsanar los conflictos. La información o el ancestro elige a la persona idónea para sobre llevar estos conflictos, revivirlos y trascenderlos, reparando así el árbol y liberando a las próximas generaciones. Podríamos estar hablando de una evolución biológica para que cada generación sea mejor que la siguiente, lo que para nosotros es el inconsciente.
Algunas veces la reparación puede ser bastante engorrosa ya que nosotros no la elegimos conscientemente. La reparación entra en conflicto con lo que realmente queremos hacer, con nuestra coherencia, esto crea problemas de excesos, acciones desmesuradas, sistemáticas y sin un «para qué» lógico. Para ello se transforma la reparación en sanación, pasando de una reparación inconsciente a una sanación consciente.
Enric Corbera:
Se puede reparar de muchas maneras: repitiendo el problema en cuestión, viviéndolo de forma opuesta, con un oficio, etcétera. Cuando se toma conciencia del problema y se cambia la emoción, se deja de reparar. Luego se puede mantener la conducta o cambiarla; esto no importa.
Aquí puede surgir una pregunta: ¿Si corto con los programas ya no los reparo?
– La respuesta es: Si, pero no. Dejamos de reparar inconscientemente, pero al comprender, aceptar, perdonar y tomar conciencia del programa, estamos sanándolo y sanando también a nuestro ante pasado, porque hemos tenido una comprensión más elevada, hemos trascendido su conflicto y lo hemos procesado desde un punto donde no necesitamos esconderlo o reprimirlo.
La Sanación es la toma de conciencia de una persona ante la creencia, programa o condicionante que está inconscientemente en su vida. Cuando la persona se da cuenta y siente la comprensión puede pasar a la acción. Esto es muy importante, muchas personas preguntan, ¿Ya he tomado conciencia, ahora qué?. Enric Corbera dice:
«Cuando alguien toma plena conciencia, no pregunta, actúa»
Esta frase no quiere decir que no tenemos que preguntar, pero si dice que cuando escuchamos, nos dejamos sentir y comprendemos, sabemos qué hacer para transformarlo todo. Las enfermedades son recitales que cantan: «¡Pasa a la acción, actúa!». Un síntoma no mata, pero caer una y otra vez en los mismos conflictos sin darnos cuenta y con miedo a pasar a la acción, nos va desgastando poco a poco.
La Sanación puede suceder de muchas maneras, he visto personas con conflictos de no tener hijos que en sus vidas de forma intuitiva han sabido liberarse de estos condicionantes y han tenido hijos perfectamente. Nadie les dijo qué programa tenían, pero sus circunstancias en la vida y sus decisiones los llevaron por el camino de la sanación. En otras palabras, pasaron a la acción intuitivamente.
Como ayuda y ejercicios tenemos como gran aliado la psicomagia. Para hablar de psicomagia tenemos que hablar de Alejandro Jodoroswsky. Este hombre ha elevado las terapias a un nivel lleno completamente de humanidad, adaptando la técnica más profesional a la forma más humana. Personalmente me gusta definirlo como:
«Jodoroswky ha traído el alma a las cosas cotidianas. Nos ha mostrado que se puede ayudar a una persona con algo tan sutil como el latido de nuestro corazón».
Bueno, después de esta introducción vamos a desarrollar lo que considero lo más importante para sanarse.
Para sanar el cuerpo primero tenemos que aprender a usar la mente
La mente es una herramienta que nos ayuda a focalizar nuestros pensamientos y deseos para crear realidad por medio de las emociones. Sin embargo no la usamos y cuando la usamos es para culpar, sufrir, temer por el futuro, recordar el pasado, separar, juzgar, etcétera.
La mente es una herramienta que, en simbiosis con nuestro corazón puede cambiar nuestro mundo. Pero para ello tenemos que dejar los pensamientos negativos y la creencia de que el exterior no tiene nada que ver con nosotros.
1º El exterior es un fiel reflejo de mi interior: La física cuántica lo explica diciendo: «La parte está en el todo y el todo está en la parte». Es decir, todo está conectado. Quiero llegar a que realmente no existen los culpables, nadie nos puede hacer daño porque nadie me puede hacer nada. Si una persona me está robando la he atraído yo. ¿Qué pensamiento, conflicto o creencia tengo qué, inconscientemente he atraído a esta persona para que me robe?. Sé que puede ser complicado porque nos han enseñado que somos seres individuales, pero todos somos seres humanos y estamos conectados.
Para poder entender mejor cómo atraemos… ¿Si pido paciencia, me caerá la paciencia del cielo o tendré una experiencia para aprender a ser paciente?. ¿Si pido perdón, el universo me da perdón o vivo una experiencia para aprender a perdonar?. La gran mayoría de veces pedimos inconscientemente…
Esta ley cuántica la intentaré desarrollar más en el último post de esta guía.
2º La negatividad: Otra contradicción más es centrarnos en la negatividad. ¿Cómo pretendemos sanar una alergia por ejemplo, si voy pregonando lo malito que estoy?. Tenemos que ser conscientes de que el victimismo, el orgullo y el ego nos encierran en creencias condicionantes.
3º Focalización: Como hemos visto la mente se nos va tanto al pasado como al futuro, pero es que la vida sucede en el presente… La transformación está en aprender a enfocar la atención en lo que hacemos, más conocido como atención plena o mindfulness.
Estos son para mí los tres grandes pasos de la mente:
– Todo lo atraigo yo, ¿Qué tengo que aprender de esto? ¿Para qué he vivido esto?
– La negatividad no me hace bien, con el incentivo de que atraigo negatividad a mi vida.
– Poner la atención en mi coherencia, en lo que deseo hacer y en mi acción presente.
La comprensión de las emociones
La emoción es el vehículo que nos conecta con el conflicto. Si cambiamos la emoción desaparece el conflicto.
Los seres humanos somos sutiles, sensibles y sobre todo emocionales, pero las emociones pasan bastante desapercibidas. Enric Corbera habla de dos tipos de emociones, emoción primeria y emoción secundaria:
– Emoción Primaria: La emoción anclada al conflicto, la que nos da miedo reconocer, aceptar e integrar, la que reprimimos.
– Emoción Secundaria: La emoción que socializamos y expresamos pero que realmente no es el vehículo hacia el conflicto.
Esto ocurre porque:
– El ser humano, <Siente lo que piensa>. Pero lo hacemos al revés, intentamos <Pensar lo que sentimos>.
Por esto soy cansino con dejarse sentir. Este miedo a no expresarnos surge de una creencia de aparentar y el «qué dirán». Tenemos que ser conscientes de que somos Seres Humanos y que todos tenemos emociones.
Para no hacer el post muy extenso lo voy a dejar hasta aquí. De momento para sanarnos tenemos que aprender a usar la mente y sentir las emociones. Dejar la negatividad, la culpabilidad, el orgullo… Comprender que somos espejos los unos de los otros y sobre todo ser coherentes y escuchar nuestra intuición.
En el siguiente post empezamos con los programas y la forma de liberarnos de ellos.
Os recomiendo este libro: